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A la derecha mundial no le gustan las democracias verdaderas e intentan, con pretensiones de golpes de Estado, generar violencia y desestabilización en los países de América Latina, donde son los pueblos los que están al frente de los gobiernos, expresó este viernes Blanca Eekhout, segunda vicepresidenta de la Asamblea Nacional (AN).
Destacó la dignidad de los movimientos sociales de América Latina y Suramérica, que se oponen al intento de golpe de Estado que el Congreso de Paraguay pretende ejecutar contra el presidente constitucional de esa nación, Fernando Lugo.
«Lo que estamos viendo en Paraguay es exactamente lo que vimos el 11 de abril de 2002 en Venezuela contra el presidente Chávez (Hugo), la intentona contra Evo Morales, en Bolivia, el intento de golpe contra Rafael Correa, en Ecuador, y lo que lamentablemente se materializó en Honduras contra el presidente Manuel Zelaya», denunció Eekhout, en compañía de movimientos sociales del Gran Polo Patriótico.
Consideró que la derecha paraguaya intenta irrespetar las reglas del juego democrático y quiere desconocer la voluntad de un pueblo soberano, a través de una «estrategia vergonzosa, indigna, que a nueve meses antes del proceso electoral intenta derrocar al Presidente constitucional con un golpe de Estado absolutamente vulgar».
Rechazó que la derecha internacional, dirigida por el imperialismo norteamericano, juegue a «falsas democracias» para destruir los sueños de los pueblos, atacar instituciones y establecer una agenda de violencia en América Latina.
«Nosotros tenemos que condenar estas prácticas, que son irrespetuosas, que establecen estrategias basadas en la mentira y en la manipulación para destruir a los pueblos y echar por tierra las victorias de democracia que se anotó el pueblo paraguayo», enfatizó la coordinadora nacional del Gran Polo Patriótico.
Calificó como dignos a los pueblos de América Latina que han alzado su voz para decir no a esa estrategia vergonzosa en Paraguay, «donde hay un Presidente constitucional, el presidente Fernando Lugo, que es quien ha asumido las banderas del pueblo soberano».